El pescado aporta grandes nutrientes y, es por ello, que desde muy pequeños es un alimento que debemos incluir en nuestra dieta. Por suerte, la dieta mediterránea cuenta con muchos tipos y muchos ingredientes que se pueden combinar para dar como resultado grandes recetas y sabores explosivos. En las haciendas, en época de celebraciones, es muy común recurrir a estos platos como el menú perfecto. En Navidad, también es muy fácil que el bacalao se convierta en la receta central. El bacalao con almejas es un plato que sueles gustar a todos los comensales, incluidos los más pequeños, puesto que tiene una textura muy blanda y, por ello, es muy fácil comerlo, además de tener pocas espinas.
Además, esta explosión de sabores aumenta cuando se mezcla el pescado con la carne. Si las albóndigas son otro manjar, las albóndigas de rape son extremadamente deliciosas.